jueves, 26 de junio de 2014

Haciendo un omelette...

   Después de varios meses de no escribir, acá estoy de regreso. Explicaciones, puedo dar muchas, pero como creo en ser honesta, diré que por un lado me he tenido que enfrentar al fenómeno de la página de blanco.
    Y para quien no sepa de qué hablo, este fenómeno es el de quien escribe NO poder escribir, en mi caso es más por enfrentarme a la autocrítica, que por enfrentarme a quien lo lee. Tras varios post que han levantado más polvo del que yo si quiera imaginé mientras escribía, he tenido que aprender o simplemente aguantar, para llegar al punto actual  de enfrentarme a una hoja en blanco (la pantalla de la computadora) me remite a preguntar: 
- ¿Iré a decir algo que ofenda a alguien?- Así, escribo páginas completas y las borro porque me pregunto si estoy siendo "demasiado mexicana", ¿estaré ofendiendo a los holandeses, los mexicanos, los animales o las tradiciones, escribiendo demasiado o de plano, mostrando mi ignorancia? Todas estas preguntas surgen por los comentarios (algunos molestos, otros no tanto) de gente que ha leído mis posts.
   No, no todos los comentarios que he recibido han sido de gente molesta, también, durante estos meses, tuve la maravillosa oportunidad de platicar con alguna de la gente que lee este blog. Porque créanme que no me daba cuenta de que REALMENTE había alguien del otro lado...
   Cuando comencé a escribir este blog, fue en la esperanza, deseo de poner un poco de orden en mis ideas. Llegar a Holanda fue, como comenté en otro post, como ser una vaquita en plena charreada (revisar Inburgering en Holanda). En cuanto pones un pie en los Países Bajos, parece que arriba se vuelve abajo y abajo quién sabe dónde quedó. Es como cuando chocas en una automóvil, el impacto es cuestión de segundos, pero en tu mente TODO se congela, puedes ver cómo vuelan los pedazos de vidrio, tus cosas dentro del carro, sientes el cuerpo como se jalonea y tu mente no termina de maravillarse de esta escena tipo "The Matrix".
   Escribir me permitió poner en palabras mis sentimientos, sensaciones y así dar el primer paso para crear un poco de orden entre tanta locura. Pero también, cada blog se convirtió en un mensaje dentro de la botella. Cada post era para mí llegar a la orilla de esta isla desierta que es el estar sola o estar acompañado entre tanta gente, pero que ninguno habla TU idioma, que nadie entiende TU lógica, para lanzar una opinión o una pregunta que ronda en la cabeza...
   Si, te integras porque quieres, porque tienes que hacerlo (o porque de plano no te queda de otra), pero eso no quita darte cuenta de que TIENES que renunciar a gran parte de lo que fuiste y cómo entendiste el mundo, así como al sentimiento (pequeño o grande) de soledad. Yo lancé la botella al mar  del internet preguntándome:
- ¿Habrá alguien del otro lado? ¿Habrá quien esté pasando o ya haya pasado lo que yo viví y que entienda, que comprenda? ¿Habrá quien le interese lo que yo escribo?
   Créanme cuando les digo que muchas veces me sentí total y absolutamente sola. No sabiendo si alguien más había pasado lo mismo (o algo parecido) a lo que YO estaba pasando, busqué y a veces encontré quien planteaba cosas por el estilo, pero la mayoría de los casos era para decir: "TOOOOODO es TAAAAAAAAAAN bonito"... Pero pues yo no lo veía TAN bonito (y a veces NADA bonito).

   Tardó cierto tiempo en que las respuestas fueran llegando, algunas buenas, otras no tanto. De pronto, me di cuenta que salían voces que me decían: "Yo pasé lo mismo", "Relájate, así son las cosas", "pronto entenderás" ¿otras? "Yo tengo tanto miedo como tu, pero no me atrevo a decirlo". Perojunto a lo bueno, vino lo no tan bueno, críticas, ataques y desprecios por alguna palabra mal usada, por una idea no compartida, por dudas que me atacaban.

   Hubo ocasiones en las que, tratando de darle gusto a la gente, escribía ligero, más bien cómico, pero después de varios post comenzó a surgir la duda: ¿Eso es lo que quiero? No, antes que otra cosa, quiero y pienso ser honesta conmigo, decir lo que siento, lo que pienso, por lo que han salido post bastante agrios, otros tantos ensombrecidos por la tristeza.
   Claro, hay temas que llegan tan fuerte como una ola en el mar, arrastrándome entre agua, arena y sal por todas partes, pero dejándome con el sentimiento más increíble de estar viva. ¿Otras veces? Hay temas que susurran tan suavecito, que apenas les entiendo, mientras que hay las piedritas en el zapato, algunos temas que simplemente se niegan a salir del tintero, algunos porque me parecen un tanto triviales, otros tantos porque son mis demonios particulares, que me atormentan y no me dejan escribir.

   ¿Puedo evadir algunos temas? Si claro, puedo hablarles de cosas absoluta y totalmente intrascendentes, pero como dije antes, así sean tonterías, quiero ser honesta, quiero presentarme a MI. Por lo que algunas veces me sorprende recibir comentarios de alguien que reclama que los mexicanos no son así.
-Claro que no lo son, porque jamás dije que TODOS los mexicanos eran así, ni TODAS las mujeres, ni TODAS las inmigrantes (latinas o no). Como tampoco pensaba escribir un recetario de integración a la vida Holandesa.
   Pero a veces parece que, por más que lo diga, debo repetirlo una y otra vez, incluyendo el "espero no ofender" "sin ánimos de ofender" etc, etc. Me he dado cuenta que, por el simple hecho de que uno publica algo en internet, ES verdad, quiero decir, parece que algunas personas (y repito ALGUNAS), no comprenden que se trata de un mensaje en una botella, no en regla absoluta y total.

   Uno se repite una y otra vez:" Toma las cosas de quien viene y tu sigue adelante". Pero como dicen, a veces no duele lo duro, sino lo tupido de las críticas. Al punto que me cuestioné el seguir escribiendo (Como podrán deducir, decidí seguir, si no, no estaríamos aquí, ¿están de acuerdo?) y otras tantas, simplemente me cansé. Sí, cansa a veces decirte:
- Bueno, te equivocaste, comprende lo que hiciste mal y simplemente no lo repitas- Pero aunque no se desea, se comete el siguiente error, ya que aquel que se pone frente a los demás y se desnuda (del alma, que es el desnudo más difícil), siempre recibirá criticas, pero más que nada, algo grandioso que es:
-Yo también lo he vivido.-

   Quien escribe, publica o presenta algo, es como ponerse en una vitrina a la vista del público. Hay quien pasa de largo y te ignora, porque simplemente no le interesas tu o lo que digas. Hay los que critican y atacan, porque simplemente no quieren alguien que vaya contra lo que ellos quieren, piensan o creen. Pero también hay los que llegan a identificarse en una u otra cosa, los que toman la botella, la abren, leen el mensaje para después tomar una pluma y papel  y así escribir un nuevo mensaje ¿En respuesta? quizá, pero también puede ser para que manden SUS propios mensajes, en sus propias botellas, desde la playa de SU realidad.

   Para mi, en algunas ocasiones, un post se vuelve la perfecta ocasión para enfrentarme a mis demonios personales. "Nimiedades" dirá más de uno(a), pero he de responder que cada quien ve sus problemas, en la mayoría de los casos, mucho más grandes de lo que quizá realmente son, ya que éstos están distorsionados por la cercanía, lo involucrados que estamos, así como la propia inexperiencia o ineptitud para solucionarlos. Algunos de estos, jamás me creí tenerlos o llegarlos a tener, pero allí están, escondidos en el armario de mi mente, esperando que caiga la noche para salir y atacarme.

   "Simplemente no se pueden hacer omelette sin romper algunos huevos". Fue lo que me dije y me senté a teclear
   Así, como voy a seguir haciendo mis omelettes, asumo que van a ver muchos cascarones partidos, algunos de los cuales no les agradarán, pero de antemano me disculpo y digo, van a haber más...